Tecnologías biométricas hay para elegir: iris y retina, huella dactilar, palmar, calorífica, vascular, escritura, voz, etc, pero de todas ellas, la que aúna mayor seguridad, fiabilidad, usabilidad y aceptación, es la biometría de reconocimiento facial.
El futuro del reconocimiento facial está en auge y muestra de ello es el interés de grandes empresas como Apple, reflejado en la compra de startups que desarrollan software de reconocimiento facial.